El mercado nos presenta
dos grandes grupos de suelos flotantes, los llamados sintéticos y los de
madera. A la hora de cambiar el aspecto de nuestro suelo, es una buena opción
para no meternos en demasiada obra y conseguir unos acabados y aspecto
renovado.
El tipo de colocación
que tienen los flotantes de madera con respecto a los flotantes sintéticos es
diferente. En los de madera su colocación es muy rápida sobre el suelo que se
tenga inicialmente, sin embargo en los sintéticos debemos de encolar
previamente antes de juntar las piezas del “puzle”.
Si hacemos referencia
en primer lugar las características y composición de los suelos flotantes sintéticos,
se dividen en dos partes bien diferenciadas, un aglomerado y el acabado en
madera.
El aglomerado actúa de
base o soporte y es lo que le otorga la distinta resistencia a cada suelo sintético,
en función del tipo de prensado que se le haya realizado. Sin embargo el
acabo en madera únicamente presenta entre los 8 mm de grosor, esto es clave
para otorgar a nuestro suelo la belleza que queramos. Estos acabados en madera
real pueden elegirse entre jatoba, roble o cerezo entre otros.
Por la experiencia que
tenemos en Drogueras Gonsi, el flotante de madera apenas es demandado en comparación
con el flotante sintético. Esto es así porque el flotante sintético es más resistente.
Cuanto un cliente nos demanda
un flotante de madera es porque tiene clara su elección. Sabe que va a pagar más
dinero por un material que le va a otorgar a su estancia una sensación al
tacto y a la vista, mucho más real a madera que el que proporciona el sintético.
Aunque con el sintético
se nota claramente que no es madera, cada vez los fabricantes nos presentan mejores
inmutaciones. Estadísticamente, en 9 de cada 10 pisos se coloca flotante sintético.
El precio de los flotantes de madera variará en función del acabado, sin
embargo en ellos flotantes sintéticos, ese precio esta influenciado por el
tipo de prensado del aglomerado, lo que le otorgará mayor o menor resistencia.
|